16 abril 2006

Felices Pascuas

Según la Biblia: “Dice Jesús: A quien yo diere el pan mojado, aquél es-. Y mojando el pan, lo dió a Judas Iscariote, hijo de Simón. Y después del bocado, Satanás entró en él. Entonces Jesús le dijo: -Lo que vas a hacer, hazlo más pronto-.” (San Juan 13, 26-28).

Ahora dice el Evangelio de Judas, texto escrito cerca del año 300 según los análisis del carbono 14: “Tu superarás a todos los demás discípulos. Tu sacrificarás el cuerpo que me viste” (en un diálogo de Jesús con Judas, a solas, en la última cena).

Definitivamente no entiendo nada de religión. Pero leo esta información y digo: Qué quilombo, ¿no? Ahora resulta que el arquetipo de la traición no sólo no era tan malo, sino que además era un simple buen discípulo que cumplía órdenes.

La iglesia (las iglesias) tiene su historia oficial, como todas las construcciones humanas. Y siempre, con el tiempo (y/o un buen equipo de gente especializada y/o mucha plata), se pueden descubrir versiones alternativas y hasta problemáticas. Si alguien tuvo la oportunidad de leer/ver El Nombre de la Rosa, puede notar la analogía.


La historia se situa en una abadía, donde se suceden los crímenes de quienes se relacionan con la biblioteca del lugar. Fray Baskerville irá desenredando la trama de los crímenes y su móvil: el domínico Jorge de Burgos intenta eliminar todo testimonio viviente de la existencia de un antiguo tratado de Aristóteles que legaliza la risa: "La risa sacude el cuerpo, deforma los rasgos de la cara, hace que el hombre parezca un mono", afirma Burgos, para agregar el evangélico argumento de que no consta en las Sagradas Escrituras que Cristo riera. Baskerville lo refuta con el argumento de que tampoco consta que no lo hubiera hecho. Pero lo interesante es la desesperación de Burgos por eliminar otra contradicción que aparece con la existencia de la risa: “si el hombre ríe, dice, es porque no tiene miedo. Y ¿cómo justificar la presencia de Dios si el hombre no teme? ¿Por qué habría de necesitar de la fe, si su entorno se resume en la festiva libertad que convoca la risa?”.

Miles de hipótesis contrafácticas se podrían elaborar a partir de cada nuevo descubrimiento. De cada refutación. De cada contradicción. De hecho, el rabino Daniel Goldman declaró: “Con la versión de Judas cómplice, posiblemente el nazismo no hubiese existido”. Yo no creo que sea tan así. La comunidad judía ha sabido difundir su condición de víctimas del nazismo mucho mejor que otras comunidades (ni que hablar de particulares); pero eso no los hace las únicas víctimas del Estado Nazi, ni mucho menos la razón de su existencia.

Anyway… qué quilombo… y justo para las pascuas! Yo me detendría a pensar a quién jode y a quién beneficia esta nueva verdad… pero soy parte de la gilada… ergo, no tengo acceso a la verdad. Tengo un inevitable acceso al Perfil.

0 Causas y azares:

Publicar un comentario

<< Home