Manchester

Llegar a Manchester a las 19hs. sin reservas en un hotel donde pasar la noche… no tiene precio! Caminamos una hora la ciudad, buscando un lugar que no nos saliera £45 la habitación (eso es lo más barato que decían algunos carteles). Entramos a un restaurante mexicano, buscando desesperadamente alguien que hable español, y por suerte lo encontramos. No tenían idea, pero nos prestaron una guía filcar de la ciudad, y anotamos las direcciones más cercanas. La anécdota para contar es que cuando finalmente conseguimos lugar (por £35 entre las dos), fue en el barrio de las lesbianas y los gays!! El administrador nos preguntó si sabíamos dónde estábamos… entendimos la pregunta porque el hotel parecía más un telo… El bar de la planta baja estaba ambientado como un cabarute (de hecho, esa noche había caraoque, pero si nos quedábamos una noche más, hubieramos llegado al show del travesti…).
De noche y de día, caminamos Manchester. A la noche salimos a dar una vuelta. La cena fue en la habitación, donde teníamos para hacernos café y te (y Maru se trajo unas barritas y yo un pan lactal. Ya habíamos almorzado bien en Nottingham, asi que alcanzó).

Al día siguiente nos levantamos temprano y salimos a recorrer la ciudad de día. Otra cosa. Mucho movimiento a la noche. De día todavía era temprano a las 7:30hs. Recién a las 10hs. abrían los museos y el local de info turística, asi que tuvimos que esperar un rato. Visitamos la galería porque había una muestra de René Burri (un chabón que fotografió al Che).

Y de ahí al Museo de la Ciencia (que cuenta la historia de Manchester como una de las cunas de la revolución industrial). Eso último fue un embole. Todo para chicos, interactivo. Además, me compré un souvenir: una locomotora. Todo era tan trucho que le dije a Maru que seguro era made in China… Dicho y hecho…

Se nota que es una ciudad industrial, con mucho movimiento. Lo que no me gustó es esa combinación de edificios antiquísimos con edificios super novedosos. Digamos, todo lo viejo es rojo, y todo lo nuevo es blanco/brillante. Y se superponen mutuamente. Como que la ciudad no les alcanza y entonces crecen para arriba. No me gustó tanto.

Lo que sí me gustó es el pedazo de biblioteca que tienen. Ahí no me dejaron tirar Papel… Ellos se lo pierden.

Bueno, por último, esta es una foto de nuestra habitación. Esa es Maru, haciendo no se qué. No se si llega a verse pero teníamos para calentar agua, y una bandejita con vasos, café, azucar, te y crema (obviamente, me llevé la mitad de las cosas).

A las 13:30 partía nuestro micro a Liverpool. Solo teníamos una hora de viaje. Ya era viernes.